Castillo de la Atalaya.
El castillo de la Atalaya se levanta sobre una estribación del monte de San Cristóbal o de la Villa, en la localidad de Villena, al noroeste de la provincia de Alicante (España), próximo a la línea de separación con la provincia de Albacete y domina la antigua línea fronteriza en Castilla y Aragón.
Actualmente, está considerado como Bien de Interés Cultural, habiendo sido declarado Monumento histórico-artístico perteneciente al Tesoro Artístico Nacional mediante decreto de 3 de junio de 1931.3
Además, ha sido restaurado en diversas ocasiones, por lo que en la
actualidad se encuentra en buen estado de conservación.
Historia
Historia
El castillo en cuestión se construyó a finales del S.XII por los árabes que entonces ocupaban toda Valencia. El rey Jaime I lo reconquistó el territorio en el 1.240 y desde entonces ha sufrido varias transformaciones y reformas que han dejado su huella imborrable a lo largo de historia.
construido por los árabes en fecha desconocida, aunque no después
del siglo XII, ya que fuentes árabes ya lo mencionan en el año
1172. Se ha especulado mucho sobre la posibilidad de que la fortaleza
se asiente sobre una fortificación o villa romana anterior, aunque
la arqueología no ha arrojado luz a este respecto.
Fue una importante plaza fuerte de los musulmanes, y muestra de su
robustez es que las tropas de Jaime I tuvieron que asediarlo tres
veces para conseguir tomarlo, finalmente, en 1240. Pese a haber sido
conquistado por los aragoneses, pasó a manos castellanas en virtud
del Tratado de Almizra. Primero se dio en tenencia a los caballeros
de Calatrava, pero pronto pasó en poder del infante Manuel de
Castilla al ser nombrado señor de Villena. A su muerte pasaría a
manos de su hijo, el insigne escritor Don Juan Manuel, Príncipe de
Villena. Éste desposó a la infanta Constanza de Aragón, hija de
Jaime II a la edad de 6 años, y la tuvo recluida en el castillo de
Villena hasta que cumplió los doce años y pudo consumar el
matrimonio. La estancia de Constanza obligó a don Juan Manuel a
efectuar reformas para mejorar la seguridad de la plaza.
Después del linaje de los Manueles, fue Alfonso de Aragón y Foix el poseedor de la fortaleza, al ser nombrado primer marqués de Villena. Si hubo rastros del paso del primer marqués por el castillo, don Juan Pacheco, segundo marqués de Villena, se encargó de hacerlos desaparecer. A él se deben los revestimientos de los muros, el segundo lienzo de muralla y las plantas tercera y cuarta de la torre, que convirtieron la fortaleza en un castillo-palacio. En 1476, alentado por los Reyes Católicos, el pueblo de Villena se sublevó contra el marqués Diego López Pacheco en una asonada que costó la vida a miles de judíos y conversos que se habían refugiado en el castillo. Desde entonces, ni la ciudad ni el castillo salieron de los dominios reales, y el marquesado quedó convertido en título honorífico.
En 1811, durante la Guerra de la Independencia, el mariscal Suchet hizo volar parcialmente las cubiertas de la torre, entre ellas las bóvedas almohades, rompiendo la parte central de las mismas y haciendo desaparecer aproximadamente una tercera parte de su superficie. Se restauraron por primera vez en 1958 y la última intervención tuvo lugar en 2000. La estructura de la plementería ya no puede observarse dado que en la última actuación que llevó a cabo la Conselleria de Cultura de la Generalidad Valenciana se ha enlucido toda la bóveda, con lo que no se puede distinguir la forma de resolver la intersección de las nervaduras.
Descripción
La puerta principal de acceso al castillo está orientada al NO, aunque existen otras dos más pequeñas que se encuentran cegadas en la actualidad. A lo largo de la parte superior del lienzo de muralla exterior corre un camino de ronda que comunica todas las torres entre sí. La puerta de entrada a la plaza de armas está orientada al SO.
A la derecha de la puerta se halla una barbacana donde recientemente
se han excavado unos restos que se cree que pertenecen la ermita de
la Virgen de las Nieves, cuya existencia se conocía por documentos
escritos.
El recinto de la plaza de armas es de planta poligonal y dispone de torres cúbicas en los ángulos, excepto en uno, donde se localiza la torre del homenaje. Estos muros fueron construidos en época almohade y revestidos en el siglo XV por orden de don Juan Pacheco. Por encima de este lienzo de muralla también corre un camino de ronda, que comunica directamente con la torre del homenaje. Tanto las torres como los muros están rematados por almenas rectangulares.
Gracias a las excavaciones de José María Soler se sabe que adosados a los muros de la plaza había diversas estructuras, entre ellas almacenes, habitaciones para los centinelas y caballerizas. Cerca de la puerta de entrada de la torre del homenaje se encuentra el aljibe del castillo, una sala con bóveda de cañón.
La torre del homenaje, de planta cuadrangular, es la estructura más
característica del edificio y destaca y se eleva por encima del
resto del conjunto. Los dos primeros cuerpos se construyeron en época
almohade mediante una técnica de encofrado denominada tapial, que
consiste en la utilización de cajones de madera que se rellenan de
tierra, guijarros, agua y cal. De esta manera se forma un bloque
sólido que se enluce posteriormente mediante el "falso
despiece", que visto de lejos simula estar constituido de
sillares. La entrada principal da acceso a una sala cuadrada, cuyo
muro carece de puntos de iluminación aparte de la propia puerta.
Esta sala está cubierta por la primera de las bóvedas nervadas de
origen almohade, datada de finales del siglo XII. Los ocho arcos que
la sustentan forman en el centro de la misma una estrella de ocho
puntas. A mano derecha, a través de una puerta de medio punto, se
encuentra la escalera que da acceso a la segunda sala. Este tramo
está cubierto con bovedillas apuntadas y conserva en las paredes
grafitos de épocas musulamana y cristiana. Al final de la escalera
se encuentra una reproducción del grafito de la mano de Fátima,
cuyo original se halla en el Museo Arqueológico de Villena. La
segunda sala está cubierta por otra bóveda almohade de la misma
fecha que la anterior. En esta sala se encuentran importantes
esgrafiados, llevados a cabo por prisioneros de la Guerra de
Sucesión, que representan edificios de estilo italiano.
Los dos cuerpos superiores se construyeron por orden de don Juan
Pacheco a mediados del siglo XV a base de mampostería. A la tercera
sala no se accede directamente, a diferencia de las dos primeras,
sino que posee su propia puerta de entrada, muestra de que esta era
la parte privada del castillo. En ella se conservan unos grafitos y
rosetones también de la Guerra de Sucesión. Su cubierta, que
también fue restaurada, es de madera. La cuarta sala, a la que
también se accede mediante una puerta propia, está cubierta por una
bóveda de cañón de ladrillo, la única techumbre original que se
conserva. En estas dos salas existen sendas ventanas de arco rebajado
que sirven de iluminación natural.
A través de una escalera empinada cubierta con bovedillas apuntadas de clara procedencia musulmana,
se llega a la parte superior de la torre, que está coronada por unas
pequeñas torres voladas al estilo luso-castellano. Desde allí se
divisa gran parte del término municipal, destacando el paso natural
de la costa a la Meseta, de gran importancia estratégica. La Cúpula almohade en la primera planta de la torre del homenaje,
una de las pocas de España, junto a las del castillo de Biar, usadas
en edificios militares.
Horarios:Mañanas: Martes a domingo, festivos y lunes víspera de festivos. Visitas guiadas a las 11:00, 12:00 y 13:00.
Tardes: Martes a sábados. Visitas guiadas a las 16:00 y 17:00.
Cerrado: lunes todo el día y tardes de domingo y festivos.
Venta de entradas desde el Centro de Recepción de Visitantes y la Oficina Tourist Info.
Precio: 3€ (1,5€ con descuento).
Tardes: Martes a sábados. Visitas guiadas a las 16:00 y 17:00.
Cerrado: lunes todo el día y tardes de domingo y festivos.
Venta de entradas desde el Centro de Recepción de Visitantes y la Oficina Tourist Info.
Precio: 3€ (1,5€ con descuento).
No hay comentarios:
Publicar un comentario